Desde la evolución del conflicto entre Rusia y Ucrania hasta el manejo de la inflación por parte de los bancos centrales serían clave para determinar el rumbo que tomará tanto la economía chilena como el dólar durante este año
Recesión a la vista
Adiós inflación, bienvenida recesión. Esa es una de las principales premisas que plantea Schroders para este año, ya que, si bien la oferta y la demanda han logrado estabilizarse, no han llegado al estado pre pandemia y los precios de alimentos y energía continúan al alza.
“La economía estadounidense ya ha dado señales de que se está ralentizando la inflación. Sin embargo, en su último comunicado varios miembros de la Reserva Federal dejaron entrever que va a continuar el alza de tasas, por lo menos durante el primer semestre de este año”, afirmó el Country Head de, Alex Toledo.
Lo anterior provocaría que las proyecciones de crecimiento para ese país sean bajas y que se mantengan las expectativas de recesión, lo que también afectaría a la economía chilena ya que el dólar tenderá a depreciarse a nivel mundial.
“En Chile no proyectamos que la divisa estadounidense se contraiga de manera significativa, pero al menos no va a seguir subiendo. Habrá una moderación importante del tipo de cambio solo en la medida que se disipen las incertidumbres políticas internas”, explicó.
Por otro lado, también afirmó que el escenario de mayor recesión también debería impactar en los empleos, tanto en Estados Unidos como en Chile, donde proyectan que el alza sostenida de tasas por parte del Banco Central realizadas en 2022 comience a frenar el empleo. Respecto al escenario político nacional en torno a la discusión constituyente y reformas tributaria y de pensiones, Toledo mencionó que “sin duda estos factores generan una incertidumbre que no se ha podido disipar”, pero que, de todas las variables presentes, la inflación es la que más golpea a la economía chilena.
“Producto de este fenómeno, los inversionistas locales tienen mucho más presente el valor del dinero, ahora que tiene un costo significativo, a diferencia de hace un par de años”, explicó.
“En la actualidad, los activos financieros tienen una ardua competencia para capturar flujos de capital, pues ya no existe la liquidez previa al alza de tasas y, por lo mismo, las valorizaciones de activos están siendo mucho más selectivas”, agregó.