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Las innegables consecuencias del e-commerce y el descenso del bodegaje

Por Prensa Cámara Aduanera

Fuente El Mercurio

Facultad Tecnológica de Universidad de Chile

Nadie puede negar los beneficios del e-commerce y su potencial, desde la menor inversión de capital y recursos humanos, la optimización de las ventas virtuales, 24 horas al día, aumento del alcance geográfico, subcontratación de servicios logísticos, disponibilidad de flujos de efectivo permanentes, entre otros. No obstante el acceso a estos canales de venta se ven mermados en compañías más pequeñas, dada su naturaleza, las complejidades financieras por las que atraviesan y el nivel tecnológico del que disponen.

 

Una menor disponibilidad de espacio de bodegas, por efecto de la llegada del ecommerce que, tras la pandemia, mantiene alto el flujo de estas cargas, obliga a las empresas a mantener mayores inventarios, para responder al boom del consumo. Esto ha generado alzas de arriendo de espacio e inclusive listas de espera para quienes buscan espacios para almacenar.

Un estudio de Colliers reveló, en marzo de este año, que el alza de las ventas electrónicas ha llevado a las empresas a modificar las cadenas de abastecimiento, provocando que hoy no haya disponibilidad de estos recintos para entrega inmediata; esta baja tasa de vacancia se mantendría en el tiempo, a raíz de la alta demanda y baja disponibilidad de espacio.

Por otro lado, el desarrollo de la logística y la calidad de servicio exigido por el cliente final, han hecho reformular toda las cadenas de abastecimiento imaginadas hasta el momento, situación que ocasiona un disparo en los precios de bodegas de hasta un 40%, sumado al déficit de oferta llegó a niveles críticos.

Tras la pandemia, hoy en día las empresas han decidió mantener mayores inventarios, de manera de ahorrarse el costo por bodegaje, el que ha alcanzado un 0.15%. Esto, de acuerdo a lo informado en El Mercurio, se dio además, tras las fuertes restricciones durante el período de emergencia sanitaria y, por sobre todo, por la alta demanda de espacios de almacenaje impulsada por el e-commerce.

“La disrupción del comercio electrónico está aumentando el espacio de las bodegas. Vemos que es una tendencia la que los centros de distribución cada vez están más cerca de la ciudad, que ya utilizan terreno urbano; así el crecimiento de las empresas es exponencial y cada vez se necesitan más para acortar los tiempos de entrega, más aún si quieren incluirse en la entrega del día siguiente”, señala Juan Eduardo Figueroa, Gerente General de Cámara Aduanera Chile, frente a este escenario.

Agrega, además que “considero que las empresas continuarán requiriendo de espacios para almacenamiento de sus productos, y la producción de nuevos centros toma tiempo, por lo tanto el e-commerce llegó para quedarse”.

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